Pablo Maella, Senior Lecturer de Dirección de Personas, IESE Business School
¿Cómo se lidera con eficacia? ¿Qué es necesario para gestionar bien? Son preguntas con multitudes de respuestas que varían dependiendo del que responde. Sin embargo, es importante tener en cuenta primero, que hay un trecho entre lo que las personas pensamos que funciona en dirección de colaboradores, y lo que la evidencia empírica demuestra que realmente funciona; y la segunda, que para dirigir eficazmente a los colaboradores tenemos que simplificar mucho, dejarnos de modas y de estériles complejidades.
Dirigir personas es entender que gestionamos a personas adultas y libres, y que por tanto, la clave de la gestión está en dar la máxima libertad y autonomía posible, para que el colaborador adulto y responsable la use para conseguir los resultados. Lo contrario, es tratar a las personas como a niños, en la medida que les decimos lo que tienen que hacer y cómo hacerlo.
La gestión eficaz de colaboradores es simple, porque se trata principalmente de fijar objetivos, dar autonomía para que se consigan, y hacer el seguimiento de los resultados. Otros elementos eficaces que favorecen la buena gestión de personas son:
• Retar la personas con sentido común y sentido de la proporción
• Hablar claro con los colaboradores, aclarar expectativas y dialogar
• Respetar a las personas tal y como son (aunque sean distintas a nosotros)
• Dar ejemplo
En algunas organizaciones se instauran sistemas de dirección de personas recargados, complejos y barrocos, que no sólo no son efectivos, sino que incluso dificultaban la satisfacción de los colaboradores, aunque ni siquiera las propias direcciones de estas compañías, a veces, sean conscientes de ello. Lo sencillo es mucho más eficaz, y en dirección de personas también.
No hay comentarios
Deje un comentario